Llegamos ya de noche por el infortunio de la avería en la bicicleta:
Y ya por fin…. Delante de la Catedral:
(El feo de rojo soy yo)
Estos son los km totales recorridos desde el inicio del Camino:
La credencial, después de tantos km, queda tal que ASI:
Y este es el “premio” a tanto esfuerzo (además de la bendición del Apóstol y la Indulgencia Plenaria para los creyentes):
Y hasta aquí ha llegado este hilo.
Ha sido una experiencia preciosa, unos días muy intensos y un ejercicio muy duro, pero la verdad, ha valido la pena, el ejercicio, los paisajes, la gente, la cultura…. todo, absolutamente todo, ha valido la pena y es motivo más que suficiente para repetir y para animar a todo el mundo a que se anime a echarse al camino y a disfrutarlo aunque solo sean unos días.
Este ha sido mi cuarto camino si mal no recuerdo, pero no creo que sea el último, ¿el próximo?, pues no lo sé, quizás de nuevo el Francés, quizás el de la Plata, quizás el Portugués…. no lo sé, hay tantos que es difícil elegir uno.
Eso sí, este no será, Dios mediante, el último camino que haga.
Confío en que os haya gustado y los hayáis disfrutado.